FIERA "ALJARAFE"
Fiera va de transgredir, de recuperar una posición de poder y control sobre tu vida. La idea de apelar a los instintos, a lo más primario para, por un lado saber quién eres en realidad y, por otro, acceder a esa energía y usarla para romper el cascarón
Fiera es un grupo incómodo. Más allá de que sus referencias y herramientas musicales sean mas o menos punzantes y ásperas, es su actitud, sus letras y su puesta en escena general la que resulta profundamente desasosegante y a al mismo tiempo irresistible. Porque Fiera basa su discurso en la cochambre, en nuestra cochambre, la cochambre de miedos, complejos y frustaciones que escondemos bajo la cuidodasa exhibición de felicidad, plenitud y equilibrio de nuestras puntualmente aireadas vidas sociales. La que se acumula como el polvo bajo la cama y cuando uno se atreve a mirar, asusta. Fiera nos obliga a bajar la cabeza, mirar e incluso restregarnos en la mierda, y además, nos muestra el camino en sus propios carnes, en una performance de una sinceridad brutal, aderezada con un humor agudo e insidioso que no rehuye, más bien multiplica, el caracter confrontacional de la misma, y acaba destrozando nuestras defensas para arrastrarnos con ellos en la vorágine.
La desazón y el vacío burgues del Aljarafe suburbio sevillano, una franquicia más del capitalismo feroz en forma de sueño escapista convertido en pesadilla asfixiante- , los horrores cotidianos de los milliones de videos subidos cada dia a youtube o de los films de Ulrich Seidl forman la base argumental de su primer disco para Humo (y segundo del grupo). La rítimica oblicua de la no-wave, las abruptas texturas industriales y el descaro del post-punk alumbran su sonido en un debut Déjese Llevar, que si bien en su momento parecía un simple divertimento satélite de la banda madre Pony Bravo-, se ve ahora aumentado y enriquecido con grandes dosis de electrónica descacharrada muchos de los instrumentos son puro DIY de fabricación casera- y descacharrante, lasciva y afilada, que lo mismo mira al ghetto-house que a las barbaridades footwork de Jlin. Una mezcla propia e intransferible, poderosa y tremendamente adictiva que ha convertido a Aljarafe desde ya en un pequeño clásico underground y al dúo formado por Pablo Peña y Darío del Moral, en una banda de referencia, de la que solo cabe esperar cosas buenas ( y feas, muy feas).