Arschmallows es un juego de cartas tan descarado como divertido, en el que todos compiten en una frenética carrera por conseguir el menor número de puntos posible. ¿Nunca habéis probado una nube bien torradita? Pues siempre apetece
Para tener éxito, tendrás que deshacerte hábilmente de tus marshmallows demasiado asados, una auténtica fuente de puntos negativos. El verdadero reto está en la sincronización: activar el final de la partida en el momento exacto para sorprender a tus oponentes y ganar la partida.
Un juego dinámico, lleno de giros y sorpresas, en el que la estrategia y los faroles son esenciales para ganar.